El regreso a Sión
Élie Barnavi
Conquistada Babilonia en el año 539 a.C., Ciro el persa es desde entonces señor de toda Asia occidental, y procura consolidar su imperio con una política liberal en relación a los pueblos sometidos. Y así se entiende su Proclamación del 538 a.C. que autoriza a los exiliados de Jerusalén a regresar a su país y reconstruir el templo. Más aún, el rey que declara querer obedecer la voluntad del Dios de Israel (Babilonia había sido conquistada en nombre de su dios Marduc), ayuda con su dinero a los candidatos a la emigración. Y así se abre en la historia del pueblo de Israel la época llamada del "Regreso a Sión".
Cilindro de Ciro relatando la toma de Babilonia, siglo VI a.C.
Además de la arqueología, las principales fuentes conocidas son los profetas contemporáneos -Hageo, Zacarías, Malaquías- y los libros de Esdras, Nehemías, que contienen trechos de historiografía, documentos tomados de los archivos de los gobernadores persas de Jerusalén y textos autobiográficos.
Dos hombres asumen el liderazgo de la emigración: Sheshbatsar, príncipe de Judá -tal vez el propio hijo del rey Joaquín, mencionado en el libro de 1º de Crónicas 3:17-18 (Los descendientes de Jeconías, el desterrado, fueron Salatiel, su hijo mayor, y Malquiram, Pedaías, Senazar, Jecamías, Hosamá y Nedabías.) con el nombre de Senazar- y Zorobabel, hijo de Shalatiel y nieto del mismo Joaquín. Y sin duda este último es quien deja su marca en esta fase del Regreso. Hombre político, es secundado por un jefe religioso: Josué, hijo del sacerdote Josadac.
Cerca de cincuenta mil emigrantes "suben" siguiendo la proclamación de Ciro, sin duda en diversos viajes. Tenemos buenas razones para creer que ellos provienen en su mayor parte de las camadas más pobres de la población judía de Babilonia, lo que va a determinar el estatus económico y el perfil social de la comunidad en vías de la reconstrucción de Jerusalén.
El regreso se revela difícil. Rápidamente los emigrantes chocan con las hostilidad de los habitantes israelitas de Judá, Benjamín y Samaria, que habían escapado de la deportación babilónica. El conflicto asume características particularmente duras con los Samaritanos, a quienes pretender prohibir la participación en la reconstrucción del Templo. En efecto, los Samaritanos se consideran israelitas de pleno derecho, los recién llegados ven en ellos el producto del cruce de los Hebreos que quedaron en el país con las etnias importadas por los Asirios después de la conquista del año 722 a.C.
Por otro lado la situación económica de los emigrantes es penosa: el país pasa por un largo periodo de sequía y muchos se han llenado de deudas. Además, en Jerusalén, con las murallas en ruinas, su seguridad es precaria. Por último, no reina la armonía entre los dos jefes de la familia real, Zorobabel procura obtener la mayor independencia posible, tal vez hasta renovar la realeza de la casa de David; principalmente jefe espiritual, Josué se contenta con la autonomía religiosa. En suma, las duras realidades de Jerusalén no responden a las esperanzas de Babilonia, la expectativa aumenta por las profecías del segundo Isaías (40-55) o de Jeremías (30-32).
Todo esto explica que el Templo, que motivara el Regreso, sólo sea levantado en el 516 a.C.; y para eso fue necesaria la fuerza de persuasión de los profetas Hageo y Zacarías. Más el Templo no va a alterar nada y la decepción de los habitantes será más amarga aún. El profeta pone en la boca de Sión estas palabras:
Isa 49:14 "Sión decía:
'El Señor me abandonó,
mi Dios se olvidó de mí. '
Isa 49:15 Pero ¿acaso una madre olvida
o deja de amar a su propio hijo?
Pues aunque ella lo olvide,
yo no te olvidaré.
Isa 49:16 yo te llevo grabada en mis manos,
siempre tengo presentes tus murallas.
Isa 49:17 Los que te reconstruyen van más de prisa
que los que te destruyeron;
ya se han ido los que te arrasaron.
Isa 49:18 Levanta los ojos y mira alrededor,
mira cómo se reúnen todos
y vuelven hacia ti.
"Yo, el Señor, juro por mi vida
que todos ellos serán como joyas
que te pondrás,
como los adornos de una novia.
Isa 49:19 Tu país estaba en ruinas,
destruido, arrasado;
pero ahora tu territorio
será pequeño para tus habitantes.
Los que te destruyeron están lejos.
Isa 49:20 Los hijos que dabas por perdidos
te dirán al oído:
'Este país es demasiado pequeño
para nosotros;
haznos lugar para vivir. '
Isa 49:21 Y tú dirás en tu interior:
'¿Quién me ha dado estos hijos?
Yo no tenía hijos, ni podía tenerlos;
estaba desterrada y apartada,
¿quién los crió?
Me habían dejado sola,
¿de dónde vinieron?' "
A pesar de todo, ese Regreso a Sión se reviste de una importancia capital en la historia del pueblo de Israel. Por primera vez en los anales de las naciones, un pueblo exiliado regresa sobre sus pasos para recomenzar todo. Sin esa tentativa es dudoso que el pueblo judío hubiera sido capaz de evitar la suerte de otras comunidades exiliadas -la desaparición pura y simple en el seno de entidades poderosas.
Texto tomado de Historia Universal de los judíos, página 28.
Tarea
1) ¿Qué profeta anuncia lo que haría Ciro por el pueblo de Israel? ¿Aproximadamente en qué año se profetiza esto?
2) Lee en el libro del profeta Daniel el capítulo 9 y explica cómo descubre que es tiempo que el pueblo regrese del exilio.
3) Investiga y resume qué se dice de Zorobabel y Josué (hijo de Josadac) en la Biblia.
4) Escribe la biografía de Nehemías.
2) Lee en el libro del profeta Daniel el capítulo 9 y explica cómo descubre que es tiempo que el pueblo regrese del exilio.
3) Investiga y resume qué se dice de Zorobabel y Josué (hijo de Josadac) en la Biblia.
4) Escribe la biografía de Nehemías.